Paco Izquierdo: “Su actuación fue capital para mejorar vidas complicadas”

El doctor Emilio Servera Pieras dedica este artículo a quien ha sido durante muchos años Director Regional de la Delegación Este de Terapias Respiratorias a Domicilio en Airliquide, empresa especializada en gases, tecnologías y servicios para la Industria y la Salud: “una persona con valores, visión de futuro y compromiso“.

Doctor Emilio Servera Pieras, Ex Jefe del Servicio de Neumología del Hospital Clínico Universitario de Valencia

A finales de 1980 Dominique Robert acogió en Lyon a neumólogos y fisioterapeutas respiratorios dispuestos a aprender los aspectos prácticos necesarios para poder mantener en sus domicilios a enfermos que respiraban de forma artificial. Allí nos enseñaron (de forma impecable y con exquisita cordialidad) lo básico para empezar… Sólo había una pega para ponernos en marcha: en España nos faltaban los respiradores adecuados. Detalle capital.

¿Cómo conseguir esos equipos? Si es cierto aquello de que sin un plan los mejores objetivos no pasan de ser buenos deseos, el asunto se presentaba muy complicado: no sólo no existían normas al respecto en el Servicio Valenciano de Salud para un procedimiento que marcaba un cambio tan radical en el manejo de la insuficiencia respiratoria grave, sino que (con la excepción de los pasos que habían empezado a darse en Cataluña y Cáceres) nadie hablaba de eso en el Ministerio de Sanidad en Madrid.

Pero en Valencia tuvimos la inmensa suerte de contar con Paco Izquierdo que, como responsable de AirLiquide, fue consiguiendo uno a uno esos aparatos. No me pregunten cómo lo peleó, pero el resultado fue que algunos enfermos que no podían abandonar el hospital, estaban de vuelta en su casa. Poder mantener vivas de forma artificial a personas en sus domicilios marcó un antes y un después que no precisa comentarios, y Paco fue el artífice en la Comunidad Valenciana. Creyó en la factibilidad de un tratamiento innovador y contribuyó de forma decisiva a sentar las bases para su desarrollo y la gestión nacional mediante los conciertos de su empresa y el Sistema Nacional de Salud. Peleó para integrar en la práctica un tratamiento visto entonces con muchas reservas y que hoy está en primera línea. Y tuvo la suerte de trabajar en una empresa que le apoyó.

Un par de años después, John Bach nos enseñaba en New Jersey cómo conseguir que tosieran quienes habían perdido las fuerzas para hacerlo. El aparato que lo permitía (llamado entonces Exsufflator) se utilizaba en algunos centros de USA, pero era prácticamente desconocido en Europa. Julio Marín, entonces Jefe de Neumología del Clínico y Catedrático de Neumología interesado en la investigación de las secreciones bronquiales, consiguió comprar uno directamente en Florida y pudimos disponer del primero en España. Gran paso, pero claramente insuficiente…. Un solo aparato no permitía milagros.  Y ahí estuvo de nuevo Paco Izquierdo logrando lo imposible, apostando por el “asistente de tos” y abriendo el camino administrativo para que pudiera extenderse  su uso en España. Algunos de quienes lean estas líneas han podido apreciar la utilidad de este aparato, reconocida por las Sociedades Científicas, pero piensen en que hace 30 años las cosas podían verse de forma muy distinta ante la que entonces era una máquina pesada, de manejo complicado y que exigía una inversión económica importante. Paco supo ver el futuro.

Un tiempo después, los recursos materiales para el manejo de la Insuficiencia Respiratoria Grave habían progresado de forma extraordinaria en los países ricos: el número total de personas con respiración asistida en sus domicilios es hoy mayor que el de las que se encuentran en los hospitales. Cuando adquieres experiencia en mantener personas vivas artificialmente, aunque la decisión de dar ese paso es de ellas, es inevitable que se genere en los miembros del equipo de tratamiento la  responsabilidad ética de buscar las mejores condiciones posibles para que puedan transcurrir esas vidas y las de sus familiares. Y el Sistema Nacional de Salud es incapaz de proporcionar a enfermos y familiares la atención psicológica de calidad que merecen: se trata de actuaciones muy complejas, muy específicas y que precisan mucho tiempo de dedicación. Si cumplen esas condiciones, sólo si las cumplen, se ha probado que pueden ser muy útiles. Gracias a contactos de la Facultad de Psicología, encontramos a la persona adecuada hace ya años… y la mantuvimos en el equipo (con el visto bueno del Servicio de Psiquiatría, con quienes coordinamos esfuerzos) mediante contratos asistenciales, becas de investigación… Fue una situación complicada debido a la imposibilidad de planificar proyectos a medio plazo… hasta que Paco Izquierdo, que había estado unos años fuera de Valencia, regresó y José Luis Díaz fue contratado por AirLiquide con una especial dedicación a insuficientes respiratorios graves.      

Paco tuvo una visión de futuro y una capacidad de gestión innovadora como he visto pocas en un escenario complicado como el suyo. Supo armonizar su visión y su misión particulares con las de su empresa y los resultados fueron excelentes. Tenía empatía natural y, además, era una buena persona. Trabajamos muy bien juntos y tuvimos en él un soporte increíble. Y formó un equipo (especial Gema) al que trasmitió sus valores.  

Paco acaba de morir. Yo le lloro porque era un amigo y mando un abrazo a Concha, Elena y Javi, pero estas líneas las hubiera escrito con igual admiración y gratitud si nos hubiéramos tratado de usted toda la vida.